PHOTO STORIES

Buscaba una foto al azar para darle vida a este nuevo álbum dedicado a fotos y capturas de diversos momentos en mi vida, sólo, con amigos, con mi familia etc etc y me he topado con esta propia.
Me ha parecido buena para los efectos oportunos, pues en principio simboliza un viaje, y esto es lo que quiero relatar en cada entrega de este álbum, un viaje por mi vida en imágenes, hablando de las fotos en sí, en qué momento se tomaron, qué sentía y pensaba en ese instante o en esa era etc etc.
Y bien, para empezar, esta instantánea está tomada en el Parque del Retiro de Madrid, finales del año 2009.
Elementos a destacar:
-Fondo, cielo, tierra, verde, azul, blanco.
Perfecto fondo para la estampa y para ese momento, la inmersión en una película, una etapa que duraría dos años, y que comenzó teñida de color, Un fondo peliculesco.
En él se dan cielo, tierra y agua. A las puertas de ese mundo: Yo, nexo entre pasado, presente y futuro. Una maleta no solo llena de emociones, también repleta de personas, vivencias, experiencias, todas iban metidas ahí, y lo siguen estando sea cual sea mi maleta y su color, en ella han de viajar siempre los elementos importantes en mi vida y compartir con ellos mis viajes, ya sean de interior o ulterior.
Enmarcado en el centro de la foto, medio difuminado, me hallo dándole la bienvenida a una nueva vida, con los pies en la tierra, por encima del agua y la cabeza en el cielo.
En ese momento recuerdo encontrarme pletórico anímicamente, con muchísima energía, con ganas de andar e ir dejando una estela de fuego en cada una de mis huellas.
Los elementos naturales del Retiro fortalecen esa sensación, mucho sol, mucho brillo, alumbrando los colores menos alegres que llevo como vestuario.
Nubes y claros también se pueden apreciar, aquí porque son parte de la instantánea, pero eso es algo que nos persigue de por vida.
Esa maleta roja fue testigo de una era tan llena de altos, con algún bajo, por supuesto. Fue testigo de mil cosas, privadas y públicas, ha llevado dentro de sí una parte de mí, la cual sigo conservando pero de una manera ya evolucionada. En cada ocasión que se abrió algo entró y algo escapó. Ahora mismo me acaba de venir a la mente que terminé por denominarla 'la maleta del mal' :D pero eso será capítulo aparte.
A día de hoy, muchas son las veces que he pasado por esta misma zona donde está tomada la instantánea, y cada vez el aire que ha bañado mis pulmones me ha traído sensaciones nuevas y otras encontradas, pero esa es la chispa de la vida, sino.....menudo muerto!!
En esa maleta quedó todo lo anterior mencionado, quedaron mil recuerdos, mil historias con principio y final, y otras sin él, personas importantes en mi vida y un largo etc.
Lo que todavía conservo de esta foto es (casi siempre, tampoco es un status crónico) el color, el color con el que deseo impregnar mi vida, que aunque veces adopte tonos grisáceos y negruzcos, intento aplacarlos a brochazos, con la brocha bañada en los colores más intensos que encuentro en la paleta de colores que suponen mis entrañas, ya que, bajo mi parecer, la vida de cada uno es del color que uno quiere que sea, y yo, aunque amante de los blancos y negros, de los colores sepia y los azulados oscuros, siempre he optado por ser de color, no monocromo, sino policromo, de mil colores y pintar cada uno de mis lienzos con los colores más puros que poseo.